Miles de pequeños y medianos productores dominicanos han encontrado la fórmula para acceder a grandes mercados, sorteando sus debilidades y la férrea competencia internacional, por medio de la formación de clústeres o asociaciones que les permiten vender sus productos bajo una misma marca, aprovechando las oportunidades mercadológicas de la ubicación geográfica.
El país ya cuenta con 10 marcas colectivas de cigarros, cacao, café, ron y artesanía que explotan la “indicación geográfica y la denominación de origen”, para darse a conocer en otras latitudes, con el soporte legal y operativo de la Ley 20-00 de Propiedad Industrial. Algunas marcas agrupan a miles de pequeños productores, como el sector del cacao, cuyo número de afiliados alcanza los 36.000, según Juan José Báez, director de la Oficina Nacional de Propiedad Intelectual (Onapi).Con el fin de fortalecer este tipo de asociaciones y estimular la creación de otras, la Onapi, el Consejo Nacional de Competitividad y la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual iniciaron ayer un taller de capacitación sobre la gestión de las denominaciones de origen e indicaciones geográficas, para convertirlas en instrumentos de desarrollo social y económico de las comunidades del país.
El taller consiste en el estudio de casos internacionales de éxito de marcas de origen de fama internacional.Los ejemplos estudiados son el Tequila de México, el aceite de Oliva de Jaén y el vino de La Rioja.“Es una figura nueva contenida en la ley 20-00 y permite aglutinar empresas locales, sobre todo de productos tradicionales con un gran potencial internacional”, según Báez.
La efectividad del modelo radica en la cooperación que se genera entre los productores de un rubro determinado para enfrentar la competencia internacional.Las inversiones para penetrar en mercados lejanos y exigentes se comparte y los beneficios, igualmente, se reparten entre todos, por medio de los parámetros que establece la ley.“No es lo mismo que un solo productor de caco intente posicionarse internacionalmente que lo haga un grupo de productores asociados”, explicó el funcionario.
Expansión y posicionamiento
Es Las marcas que aprovechan la indicación geográfica y la denominación agrupan a los productores de una determinada región o localidad y funcionan por medio de un consejo regulador.Además de mercadearse internacionalmente, se procura el mejoramiento de la calidad de los producción, con el fin de generar prestigio para la marca.En el país existen marcas destacadas, según el director de Onapi. “Estamos hablando de Café Valdesia, Café Montebonito, Café Barahona, de la marca Prodom que agrupa a los productores de ron. En artesanía de Bonaño se encuentra la marca Inverlita. Es decir, son ya 10 marcas colectivas, indicación geográfica y denominación de origen que se han desarrollado el país mediante la ley 20-00”.El director de Onapi testifica los beneficios que este tipo de alianza ha reportado a pequeños productores dominicanos que han penetrado a mercados internacionales muy competitivos.“Hay productores que de manera independiente no hubiesen logrado lo que hoy. Es por ello que han decidido ser partes de estos consejos regulares”.Durante 2012 el país exportó 3.150 productos diferentes a 170 países. En un año se aumentó la cantidad de mercados a los que el país tiene acceso, pasando de 163 a 170, con la inclusión de naciones de Europa del Este y de Asia.Entre enero y junio de 2013, 12 productos agrícolas dominicanos recibieron la certificación de calidad, lo que aumentaría el liderazgo mundial del país en productos como cigarrillos, cacao, banano, caña de azúcar y ron.
Fuente : http://listindiario.com.do
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